Miros

Las cámaras de seguridad contribuyen a explicar el proceso educativo

El tema de las cámaras de seguridad en los centros educativos es un tema sumamente polémico. ¿Por qué digo esto? Con la etiqueta “cámaras de seguridad para escuelas y colegios” realicé una búsqueda en Google y obtuve cerca de 15.300.000 resultados en 0,61 segundos.[1] El número, por sí mismo, da respuesta a la pregunta.

Las cámaras de seguridad en las instituciones educativas son una gran herramienta, tanto para el personal académico como para los padres de familia y representantes. Entre los puntos a favor de su uso se mencionan:

  • Brinda mayor tranquilidad y seguridad tanto a los alumnos como a los padres y maestros.
  • Contribuyen a evitar situaciones ilícitas o de violencia, así como erradicar el bullying.
  • Facilita realizar una evacuación de emergencia relacionada con incendios u otras situaciones potencialmente peligrosas.

Este tema ha abierto un debate sobre la legitimidad y conveniencia de emplear este tipo de dispositivos en los centros de enseñanza. Por ejemplo, las opiniones que las rechazan argumentan que afecta a la imagen y la intimidad, derechos fundamentales del ser humano.

Otros justifican el uso para unos lugares y para ciertos fines. Aceptable en los espacios comunes, pasillos, laboratorio y sala de ordenadores para evitar robos y vandalismo. No aceptable en los espacios de enseñanza-aprendizaje.

Existe una diferencia y una recompensa. Una cosa es el uso de las cámaras con carácter disuasorio o preventivo y otro, que sirva para fines educativos. Las cámaras filmadoras son parte de la tecnología aplicada a la educación, como apoyo a la formación del profesorado. Igual que acudimos a los médicos cuando tenemos una dolencia, podemos acudir a las cámaras cuando tenemos problemas pedagógicos, y uno de ellos es que la formación pedagógica actual es nula y eso se transmite en las aulas.[2]

No hablamos de que la educación sea un derecho, tenemos derecho a una mejor educación. Los profesionales que comparten la educación de nuestros hijos no reciben la capacitación suficiente para perfeccionar el proceso de enseñanza-aprendizaje. Si las cámaras ya están instaladas en las aulas hagamos de ellas el mejor uso posible para analizar cómo trabajan los docentes en los salones de clase y cómo ayudarlos a mejorar las técnicas de enseñanza.

¿Qué ganan los profesores con esto?

  • permitiría mejorar en oratoria, comunicación o desarrollo de los temas.
  • revisar si han sabido transmitir a sus alumnos o por el contrario han perdido su atención.

Los maestros también necesitan capacitación. La retroalimentación sistemática y útil nos hace ser mejores en nuestros trabajos. Es otra forma saber cómo mejorar mis prácticas, en qué mejorar, qué me hace diferente a los mejores, qué hice diferente.

Nuestros maestros, nosotros, merecemos algo mejor, para ayudar a mejorar a los demás. Las cámaras de filmación pueden ser una herramienta que nos ayuden a ser mejores. ¿Cómo ser un maestro más efectivo?, ¿cómo ayudar a los estudiantes a tener logros significativos?

Las cámaras pueden ayudarnos a responder si hacemos preguntas que despierten interés, si utilizamos múltiples formas para explicar una idea, cómo ayudamos a los estudiantes a corregir sus errores. Es una oportunidad para reflexionar sobre las estrategias de enseñanza, la metodología, la gestión en el aula y diferentes aspectos de la clase.

Es avanzar de lo abstracto a lo concreto. Permite comparar lo que funciona y lo que no funciona. Se pueden apreciar elementos intrínsecos a la docencia que ayudan a entender a los demás de qué se trata el proceso educativo y cómo mejorarlo. Se pueden apreciar circunstancias que serían difíciles de plasmar en un plan de clases.

Hagámonos las preguntas antes de visualizar las grabaciones y busquemos en ella, solo las respuestas necesarias. Quien sabe lo que quiere, encuentra lo que busca…

 


[1] La búsqueda se realizó el 28/10/2018.

[2] Bill Gates (2014) Sobre Educación y capacitación de los profesores y Beatriz Portinari, (2017) La instalación de cámaras en un instituto reabre el debate sobre su uso.

 


Publicado

en

por

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *